El tabaco de liar reflota las cuentas del sector tabaquero

Decir que la crisis hace mella en los bolsillos es de perogrullo pero acertar en cómo influye esto sobre las tendencias de consumo es harina de otro costal. En el sector tabaquero la primera consecuencia ha sido el descenso de consumo, en términos económicos, pero la segunda ha sido el alza en determinados segmentos como el tabaco de liar, que ha resurgido con fuerza en el último año. Así lo reflejan tanto la prensa especializada como la económica y hasta la local, que se ha hecho eco durante los últimos meses de esta tendencia.


Incluso con un descenso de la demanda durante 2010 se ha producido un aumento en la facturación de un 32% hasta abril frente al mismo periodo de 2009, según Expansión, que se explica por la reacción del Gobierno, que al percibir esta tendencia aprovechó para subir el impuesto específico de tabaco de liar a 6 euros por kilo y un mínimo de 50 céntimos por kilo, es decir una media de 20 céntimos por paquete de 20 gramos. El resultado es un total de 129,68 millones de euros facturados hasta abril.

Las cifras a nivel regional reflejan esta misma evolución de forma que en Cantabria, por ejemplo, se registró un descenso de un 8% en el consumo de cigarrillos hasta abril y un aumento del 201% en tabaco de liar; un 116% en Segovia;  un 50% en Asturias; un 34% en Galicia con puntas como la de Vigo de un 175%.

Si además se comparan las ventas de tabaco de liar computadas en 2009 y 2010 con las que se producían históricamente la diferencia es aún más abultada: en 1950 la picadura representaba la mitad del consumo de tabaco y en 1970 tan sólo suponía un 3% del total. Más recientemente, en 2002, en algunas regiones como Zamora se registraba un gasto de 67.891 euros en este tipo de tabaco y en 2010 se ha multiplicado esta cifra por 9 (599.339 euros) en la mitad de tiempo.

Finalmente y en lo que se refiere al efecto económico de esta tendencia en la caja de los estancos, aunque hay opiniones para todos los gustos, muchos estanqueros coinciden en destacar que aunque supone un descenso en cuanto a ingresos por gramos de tabaco vendidos estos ingresos se complementan con la venta de los productos que rodean al tabaco de liar: papel, cajas, boquillas, esponjas, fundas, etc. En espera de mejores tiempos tanto para la Economía nacional como para la economía doméstica quedará por ver si se trata de una tendencia circunstancial o se asentará a medio y largo plazo.